Con un marcador muy apretado, una pobre demostración a la ofensiva pero una gran actuación de Alejandro Soto, México obtuvo su primera victoria en su presentación en el Pre-Clásico Mundial en Mexicali.
Fue apenas en la primera entrada cuando México hizo el único daño que pudo en el partido.
Luego de que Sebastián Elizalde fuera puesto out, Esteban Quiroz y Adrián González recibieron bases por bolas para colocarse en segunda y primera base, respectivamente.
Fue entonces cuando vino el ‘Jesse’ Jesús Castillo para conectar sencillo que trajo a Quiroz al plato con la primera rayita del encuentro.
Agustín Murillo fue el siguiente, y conectó elevado de sacrficio para traer a Adrián González desde tercera con la segunda carrera para la novena de Edgar González.
Desafortunadamente, los mexicanos pudieron embasarse gracias a los lanzamientos descontrolados que regalaban bases de los pitchers checos más que por méritos propios; ya que solamente Jesús Castillo, Leonardo Heras, Alex Mejía y Walter Ibarra pudieron conectar imparables.
Adrián González recibió 3 bases por bolas para tener solamente un turno legal en el que no pudo conectar de hit.
Quien sacó la casta por México fue el lanzador abridor Alejandro Soto.
El elegido por Edgar González arrancó el juego retirando a sus 3 primeros bateadores en fila y por la vía del ponche.
Para la segunda entrada recetó 2 chocolates más y para la tercera otro dos más; para un total de 7 ponches ante 10 bateadores totales que enfrentó.
A Soto le siguieron de relevistas, Mark Serrano, Armando Aguilar, Jake Sánchez y Oliver Pérez; quien se llevó el salvamento.
Por República Checa, destacaron el lanzador Jan Novak y el patrullero central Matej Hejma; quien conectó cuadrangular solitario entre derecho y central en la 8va. entrada para enmudecer al casi lleno Estadio B-Air y meterle presión a la novena mexicana.
Novak se lució en la lomita por espacio de 3 entradas y 2 tercios en donde solo permitió 2 imparables, regaló 2 bases y ponchó a 3 rivales.
El pitcher ganador resultó Alejandro Soto, mientras que el derrotado fue el abridor Marek Cervenka.
El experimentado Óliver Pérez se quedó con el salvamento.
El próximo rival de México será Nicaragua, en duelo de ganadores para definir a uno de los finalistas del certamen.
Por otro lado, República Checa enfrentará a Alemania en duelo de eliminación; quien pierda se despedirá de sus aspiraciones de ir al Clásico Mundial en 2017.