Tras la asamblea de este miércoles 11 de enero, la situación de Liga Mexicana de Béisbol parece no pintar nada bien y podría empeorar.
La situación actual no pinta nada bien para Liga Mexicana de Béisbol en este 2017, pues parece que la liga está totalmente dividida en dos grupos, quienes no parece que llegarán a un acuerdo.
El primer grupo, el cual se ha llamado “la Vieja Guardia”, está constituido por Sultanes de Monterrey, Diablos Rojos del México, Guerreros de Oaxaca, Tigres de Quintana Roo, Piratas de Campeche, Olmecas de Tabasco, Saraperos de Saltillo y Generales de Durango (antes Delfines de Ciudad del Carmen).
En el segundo grupo, el cual ya se conoce como “la Nueva Generación”, está conformado por Toros de Tijuana, Vaqueros Laguna, Leones de Yucatán, Pericos de Puebla, Acereros de Monclova, Rojos del Águila de Veracruz y Rieleros de Aguascalientes.
Quien quedaría sobrando serían los Bravos de León (antes o todavía Broncos de Reynosa). Dicho equipo está excluido por no cumplir aún con los requisitos para cambiar de sede, por lo que no jugaría la temporada 2017 de Liga Mexicana de Béisbol. Incluso le habrían negado la entrada a la asamblea a Eliud Villarreal (presidente de Broncos) así como a Mauricio Martínez; el empresario que busca llevarse al equipo a León.
El grupo de los 7 equipos argumenta que el otro grupo no quiere permitir el ingreso de León (o Reynosa) ya que los grupos quedarían equitativos; de 8 equipos cada uno, y ya no podrían ejercer la ‘mayoría’ sobre ellos.
Según reporta la Revista Proceso, y diferentes reporteros a través de redes sociales, el grupo de 8 equipos habría despedido a Plinio Escalante; quien fungía (o funge) como presidente de la Liga Mexicana de Béisbol.
Tras haber conocido su despido, Escalante abandonó la asamblea del día de hoy en la Ciudad de México. La asamblea, que continuó después del abandono de Escalante, carecería de validez al no estar presente el presidente del organismo.
Esto significa que, a pesar de que la ‘mayoría’ optó por despedir a Escalante, la decisión de su despido quedaría anulada puesto que esta asamblea no tiene validez. Además, dicho tema no estaba en planes de esta asamblea, por lo que tampoco se haría oficial.
De acuerdo al reporte de Proceso, Escalante aceptaría su destitución siempre y cuando se respeten los términos de su contrato que por ahora sigue vigente hasta 2018. Es decir, el directivo tendría que ser indemnizado con unos 5 millones de pesos.
Hay que recordar que todo este problema surgió desde aquella ocasión en que José Maiz, presidente de Sultanes de Monterrey, declaró que no se le hacía justo que Toros de Tijuana jugará en LMB con tantos peloteros mexicanos nacidos fuera del país (o mexicoamericanos).
Esta declaración desató la controversia, a la que se unieron Carlos Peralta y Alfredo Harp Helú; quienes también apoyan el restringir la contratación de mexicanos nacidos fuera del país.
Del otro lado, Alberto Uribe, Gerardo Benavides, José Antonio Mansur, Erick y Juan José Arellano están a favor de que la contratación de jugadores mexicoamericanos sea libre.
Ahora el grupo que está en contra de la libre contratación de mexicoamericanos se expandió a 8 equipos (la Vieja Guardia), e incluso Alfredo Harp Helú anunció que tanto Diablos Rojos del México como Guerreros de Oaxaca jugarían solamente con peloteros nacidos en México para este año.
En la pasada asamblea realizada el 5 de diciembre en Washington, LMB anunció de manera oficial que se había llegado al acuerdo de jugar con un límite de 9 peloteros no nacidos en México y 6 extranjeros; aunque ahora el grupo de 7 desconoce dicho arreglo y asegura que fue un error que LMB hubiera hecho ‘oficial’ esa información.
El grupo de los 8 considera que los peloteros no nacidos en México (ya hemos mencionado que no usaremos el mismo término que ellos insisten en usar) quitan las oportunidades a los jóvenes mexicanos que buscan un lugar en algún equipo de LMB. Además, insisten en que los equipos los contratan de forma irregular sin un acta de nacimiento que realmente avale que son mexicanos (recordemos que, por ley de la Constitución Política, es mexicano cualquiera nacido o no en el territorio nacional mientras sean hijos de padre o madre mexicana).
Por ahora, además de que Plinio Escalante dejaría de ser presidente de Liga Mexicana de Béisbol, se ve muy cercana la opción de que “la Vieja Guardia” juegue su propia liga con 8 equipos, y que “la Nueva Generación” haga lo propio con los otros 8.
El problema podría llegar hasta los tribunales, pues Plinio Escalante explicó que todos los acuerdos que se hayan tomado en la asamblea sin estar el presente o el presidente del Consejo (Gerardo Benavides) pueden ser dados marcha atrás en un tribunal, ya que no quórum legal (el número de asistentes que se requieren para que la sesión pueda adoptar una decisión formalmente válida).
Tras 10 años al frente de la Liga Mexicana de Béisbol, Plinio Escalante había tenido una gestión exitosa al frente del organismo, hasta que el año pasado se aceptó jugar con un número ilimitado de peloteros mexicoamericanos.
¿Será que la LMB ha llegado a su fin después de 91 años?
Te invitamos a que recuerdes los episodios anteriores de esta polémica en LMB, donde ya se comenzaban a dividir en dos bandos:
Comunicado oficial sobre la Asamblea de Presidentes del 27 de septiembre
Postura de Toros, Vaqueros, Leones y Pericos sobre las declaraciones de José Maiz