En presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, este miércoles fue inaugurado oficialmente el nuevo Salón de la Fama del Béisbol Mexicano; el cual estuvo auspiciado por el empresario Alfredo Harp Helú.
El nuevo recinto de los inmortales tiene su nueva sede en el Parque Fundidora, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León. Además de López Obrador y Harp Helú (también dueño de Diablos Rojos y Guerreros y ahora inversionista de Algodoneros), el evento contó con la presencia de Jaime Rodríguez Calderón; gobernador de Nuevo León.
Entre otras personalidades presentes, también se encontraban en el evento Omar Canizales (presidente de LMP), Javier Salinas (CEO de LMB), Ana Gabriela Guevara y Edgar González (director de ProBeis) así como diferentes presidentes de clubes tanto de LMB como de LMP.
Durante su discurso, el presidente comentó que le tiene tanto afecto al béisbol que aún lo juega y que está “bateando por encima de .300, así como me ven”. Afirmó que es seguidor de la Liga Mexicana.
“Se aprobó en el presupuesto una partida para fomentar el béisbol; se van a crear academias y escuelas en distintas partes del país para que los jóvenes puedan estudiar y practicar el béisbol”, agregó López Obrador.
“El Salón de la Fama del Béisbol Mexicano es un jonrón con la casa llena para la historia de este deporte en nuestro país, es un lugar para los inmortales de nuestro béisbol, los cuales nos inspiran con sus hazañas”, comentó Harp Helú.
El primer salón de la fama fue impulsado por Alejandro Aguilar Reyes, mejor conocido como Fray Nano, con el auspicio del empresario Eugenio Garza y abrió sus puertas el 10 de marzo de 1973 también en la ciudad de Monterrey.
A partir de este jueves 21 de febrero, el recinto abrirá sus puertas al público en general.
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